En lingüística, principalmente en la enseñanza de lenguas extranjeras, se conocen como secuencias formulaicas, o lenguaje formulaico, a una serie de estructuras “prefabricadas”, fijas, que los hablantes utilizan de manera automática, sin reflexionar sobre ellas. Como su nombre lo indica, son “fórmulas” establecidas que se emplean en contextos comunicativos definidos. Ejemplos de estas secuencias son, entre otros, los refranes y los marcadores discursivos.
Ahora, ¿qué relación tiene esta definición con la literatura? ¿Podría hablarse de libros formulaicos? ¿Acaso existe una fórmula para escribir libros exitosos? Si nos fijamos en la repercusión que han tenido Ian Fleming y Dan Brown con las historias protagonizadas por sus famosos personajes –James Bond y Robert Langdon, respectivamente- parece que la respuesta a las dos últimas preguntas es “sí”. Esta semana, en Ediciones Kitzalet, te contamos en qué consiste esta fórmula.
Elementos clave de un thriller
Toda obra literaria -de suspenso, misterio o acción- exitosa cuenta en su receta con los siguientes ingredientes:
- Un héroe
- Un objetivo por cumplir
- Obstáculos que intentan imposibilitarlo y, por supuesto,
- El momento en el que el héroe vence al villano y alcanza su meta.
Veamos cómo esta fórmula se cumple en los textos citados como ejemplo:
- James Bond es un agente del Servicio Secreto de Inteligencia británico, con “licencia para matar”. Bond es un hombre refinado y seductor que trabaja de manera encubierta en las misiones que se le asignan; entre ellas, recuperar un dispositivo capaz de descifrar complicadas comunicaciones, como en Desde Rusia con amor (1957), e investigar un doble asesinato, como en Agente 007 contra el Dr. No (1958). Sus enemigos hacen todo lo que está a su alcance para evitar que Bond cumpla su objetivo, pero no lo logran y, al final, Bond triunfa.
- Las aventuras de Robert Langdon, profesor de simbología religiosa en la Universidad de Harvard, consisten en resolver acertijos que lo llevan a diversos lugares emblemáticos del continente europeo, en búsqueda de un elemento u objeto de suma importancia para la humanidad, como la antimateria, en Ángeles y demonios (2000), o el Santo Grial en El código Da Vinci (2003). Langdon debe enfrentarse a organizaciones que tratan de impedir que logre su cometido. Al final de cada historia, Langdon descifra los enigmas y resulta vencedor.
Si trasladamos esta fórmula al cine, nos encontramos con el arqueólogo y también profesor universitario -como Langdon- Indiana Jones. Este personaje -creado por George Lucas y Steven Spielberg– emprende diversos viajes con la finalidad de encontrar objetos de gran valor histórico. En cada una de sus aventuras, Jones se enfrenta con rivales que compiten por conseguir el mismo objeto, pero para emplearlo con fines siniestros. Algunos de estos objetos son la calavera de cristal y -nuevamente- el Santo Grial.
Dan Brown revela el secreto de su éxito
No solo el maestro del terror, Stephen King, tiene una rutina estricta a la hora de escribir. Dan Brown, quien saltó a la fama luego de publicar el best seller El código Da Vinci, compartió su secreto de trabajo en una Master Class.
Para Brown, la idea detrás de una historia literaria no tiene por qué ser sumamente original, ya que el “gancho” del libro no se encuentra en ella, sino en los “cómo”: en la manera que tiene el protagonista de resolver los conflictos a los que se enfrenta.
El autor suele levantarse a las 4:00 a. m., tomar café y un batido de espinacas, para luego sentarse a trabajar entre seis y nueve horas, ya sea delineando, desarrollando o editando su próxima historia. Además, utiliza una aplicación que apaga la pantalla de su computadora durante un minuto cada hora, con la finalidad de obligarse a hacer pausas durante su jornada laboral.
Finalmente, Brown aconseja que la cura para superar el bloqueo del escritor está -paradójicamente- en escribir: “Escribe algo malo que nadie verá jamás. Pero ese proceso te mostrará el camino de regreso a lo que es bueno. Tiro unas 10 páginas por cada una que guardo”.
¿Te atreves a escribir una historia siguiendo la receta de los thrillers? ¿Cómo serían tu héroe y tus villanos? Cuéntanos en la sección de comentarios…